¿Sabías que las mujeres embarazadas son más vulnerables a padecer una intoxicación alimentaria? Ésta ocurre al ingerir bacterias, parásitos o virus presentes en los alimentos.

De acuerdo con expertos en el tema, el sistema inmunitario de la madre se altera durante el embarazo, es decir, su cuerpo no logra defenderse de todos los microorganismos nocivos.

Existen dos parásitos transmitidos por alimentos que afectan a las embarazadas. La listeria, una bacteria nociva presente en alimentos refrigerados listos para consumir y alimentos de origen animal crudos o cocidos parcialmente; y el toxoplasmosis, un parásito nocivo que causa una enfermedad difícil de detectar. Puede encontrarse en la carne cruda, las frutas y verduras sin lavar, las bandejas sanitarias para gatos que están sucias y lugares al aire libre.

¿Cómo prevenir las intoxicaciones?

1. Limpia. Lávate las manos con agua tibia y jabón, antes y después de manipular alimentos. De igual forma, lava con agua caliente y jabón las tablas de cortar, los platos, los utensilios y los encimeros.

2. Separa. Separa la carne cruda de los alimentos listos para consumir. Si es posible, usa una tabla de cortar —y un recipiente— para cada alimento. Divide los alimentos cocinados de los crudos.

3. Cocina. Cocina bien los alimentos. Mantén los productos fuera de la zona donde las bacterias puedan crecer.

4. Enfría. Tu refrigerador debe indicar 40° F (4° C) o menos, y el congelador 0° F (-18° C). Refrigera o congela los alimentos perecederos.

En caso de detectar alguna anomalía en tu salud, visita de inmediato a tu médico. Recuerda que no sólo está en juego tu bienestar, ¡protege a tu bebé!


Fuente: clikisalud.net